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Cosas antiguas

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Por si por aqui hay alguien que me echaba de menos o se preguntaba donde me había metido lo cierto es que me habia perdido.

No es que ya me haya encontrado del todo pero estoy en ello. Y por primera vez en muchos años he pedido ayuda.

El caso es que ando recuperando el gusto por lo escritura si es que alguna vez lo perdí. Quizás lo que pasaba es que en la barabunta de cosas que me han pasado – nos si incluimos la pandemia – habia perdido rutinas, costumbres, hàbitos.

Mientras me reencuentro con dichos hábitos, costumbres, rutinas estoy repasando papeles viejos.

Mirad que encontré en octubre de 2020 y he reencontrado hoy mientras revisaba libretas.

Las ventanas enseñan

El mundo de afuera

Exteriores de luz

Tras cristales opacos

Ahi va otro:

Suciedad acumulada

De tristes oficinas

Con oficinistas que acumulan

Sucia tristeza.

Obviamente no me gustaba (ni me gusta) el trabajo de oficina. Y mucho menos en lugares sucios y cerrados.

Fijaos en este fragmento:

Horas que pesan

Como losas de mármol

Hay horas que traen

El muermo en el viento

Horas que sentencian

A polvo los minutos

Menudo animo tenia …. Veamos uno un poco más alegre:

Bichos extraños

Colores vivos

Zumbidos sonoros

Vuelos danzantes

Y el último:

Es la primavera

Que trae la muerte

Del invierno frio

Y nos saluda

Con renacer de hojas y bichos.

Tengo apuntado que estos fragmentos estan datados en 2010 y que los encontré en un papel húmedo que luego se mojó.

Mi “hormiguil” letra

Me ha gustado compartirlos con vosotras. Os pongo también una foto de la libreta donde hoy los he reencontrado escritos.

Hasta la próxima.

Un besote

Todos los textos y fotos son mios. Si algo os mola compartid pero no os apropiéis de ello.

Caballero del Dragon

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Sintió sus pies descalzos sobre la hierba.

Miró sus dedos libres de calzado como a el le gustaba ir. 

Asi, descalzo, caminó por el prado, sintiéndose libre y en contacto con el suelo. El ambiente era  fresco, pronto el otoño dejaría paso al invierno y los árboles que veía ya habian vestido sus hojas de marrón.

Notó aire càlido a su alrededor en contraste con el frio que notava. Sentía su piel palpitar por el contraste entre el fresco del prado y el aire càlido que lo rodeaba.

Quizás había otra manera de hacer eso però él le habia dicho que lo desconocía así que decidió confiarse a el. Dar un paso a ciegas.

Alzó la mirada, con la claridad del dia lo vió recortado contra el azul del cielo  volando en circulos sobre él. Era sobrecogedor. Tanto como la primera vez que lo vio, cuando pensó que el ángel de la muerte habia venido a llevárselo.  Fue un angel si, però que llegó para arrebatarselo a la muerte segura que ya lo rondaba.

Lo miraba admirando su aterradora belleza. Vio los reflejos dorados  de su lomo brillante al sol y su piel cobriza en la panza. Sus escamas como oro pulido. Frente a él sus inmensas alas ensombrecian el suelo. Lo ensombrecia a el, que se sentia pequeño però fuerte.

Gracias a el.

Por el.

Y de repente un batir poderoso de alas y una energia abrasadora que lo poseyó, fundiendose en ella.

Se sintió ser con todo. Se sintio uno con la criatura.

Y vio mundos, tierras, gentes que acaso ya ni existian. Guerras. Belleza. Tiempos que fueron. Sintió como la màgia lo envolvia, como se fusionaba con el. Su piel quemaba, casi como si se le cayera a tiras, su cuerpo parecía desaparecer. Poder. Un poder enorme que lo cubría.

Se sintió grande. Podía volar, notar el aire alrededor y contra su cuerpo. Vio el mundo a sus pies; las montañas, los prados, los animales pastando, las ciudades y sus gentes atareadas.

Luego todo se convirtió en oscuridad, dolor y vacío.

El silencio.

Cuando abrió los ojos estaba dormido sobre el dragón que respiraba debajo de él. Su movimiento acompasado. Se sentia exhausto. Los dos estaban exhaustos. El arrullo del gran dragon lo acunó y  acurrucandose sobre las escamas calidas volvió a quedarse dormido.

Texto de mi creación.

Ninú y Asharash (2a parte)

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Por la mañana se levantó con el aroma del te especiado. Bajó a la cocina y había tambien café, a ella le gustaba mucho. Siempre tomaba por las mañanas como desayuno con tostadas con mantequilla y miel o un trozo de queso. Lo buscó con la mirada, intentando adivinar donde debia estar. No era fàcil, era esquivo y muy huidizo, como un gato salvaje. Como lo que era, un animal de presa perspicaz y desconfiado.

Cansada de intentar algo que no iba a conseguir dejó de preguntarse donde estaba y se sentó a desayunar. El café tambien estaba especiado, clavo. Pero estaba delicioso. Se lo tomó a sorbos mientras miraba la pared del salón, con el cuadro bordado por Fiona que habia colgado alli hacia dos veranos. Incapaz de decirle que no a aquella muchacha tan jovial y … defendida por Yiarza. No iba a llevarle la contraria a semejante defensor.

 

– Te hace feliz?

– Si – respondió sin girarse.

– Eso esta bien

– Y a ti?

– El que?

– Eres feliz?

– Ahora no, estoy aquí y ella alli. No siempre se es feliz Ninú, la felicidad es un estado transitorio. Me gusta estar en mi casa, con mis cosas, mis libros, Samel y, sobre todo, Maisa.

– Volveré a la Mansion, con Duncan que dice que se retira.

– Aun juega?

– Cayó en desgracia al separarse, luego lo ficharon en un equipo pequeño y ahora está muy cotizado otra vez. Pero el no quiere cambiar de equipo aunque le paguen más. Ellos lo ayudaron cuando nadie lo quería, decían que tenia que defender lo suyo.

– Que le pasó?

– Se supone que se casó con una chica del clan, de una familia amiga de la suya. Esas bodas de las gentes del norte. Por lo que descubrieron por lo visto su mujer se entendia con uno de sus tios. De los que prepararon la boda. El, enamorado, no se enteró de nada pero un colega hizo unas bromas y se las tomo a mal. Se pelearon y luego descubrió que eran ciertas. De hecho su mujer se lo tiró en cara. Se largó. Pidió el divorcio y se lo dio todo salvo el dinero que tenia en una cuenta del pequeño continente. Casa, coches, dos cuentas, joyas.

– Debe saber que lo sabes. No te lo contará.

– Algun dia lo hará. – el no dijo nada –  Me gusta. Es amable, amoroso, cariñoso, dulce … y todo un hombre capaz de defenderme.

– Eso espero.

– No es tu Asharash, nadie es como tu.

– Cada uno es como es cariño.

– Tu eres especial. – el sonrió, sabia que era especial, claro. Mucho mas de lo que le gustaria ser.

Pero lo era. Y para ella lo era todo. Si la necesitaba moveria cielo y tierra por el. Ya lo habia hecho, Shalashar habia puesto a prueba su amor por el..

– Deja de pensar tanto. Me han dicho que por aquí hay un mercado de antigüedades, ando buscando un par de cosas. Vamos?

– Te llevo?

– Tu coche es mas manejable y conduces mejor.

– Te enseñé yo – le dijo dandole un golpecito en el hombro. – Vas a ir asi? – el se miró. Unos tejanos raidos y una camisa a cuadros grandes, el largo cabello recogido en una trenza mal hecha. Parecia un leñador empobrecido. Pero estaba de moda un libro erotico que tenia escenas muy torridas con el protagonista vestido de forma similar. De por si ir con el ya era distraido, no queria ni imaginar que pasaria si iba asi vestido. Buscando guerra habria dicho Duncan

– Que hay de malo?

– Oh Asharash, de malo no hay nada … revolucionaras el mercado – el se echó a reir.

– Esta bien, me cambio de ropa … Todo por un libro!

– Lo has leido?- le preguntó sorprendida

– Corria de mano en mano por la casa. Lo lei en una noche, tanta letra para tan poca historia.

– Es un éxito.

Ambos se echaron a reir y se fueron a cambiar de ropa. No reducia su sensualidad pero unos pantalones nuevos y una camisa blanca con un chaleco ya no era tan erotico. Se puso unas alpargatas.

Boots, Espadrilles, Shoes, Textile

La población estaba a unos 30 kms y disfrutaron de un agradable trayecto por carreteras locales, entre campos verdes salpicados por el ganado paciendo tranquilo. Todo muy bucolico. Era un pueblo pequeño con un mercado que lo doblaba en tamaño. Quintaip era famoso porque en su mercado se podian conseguir joyas, muebles, menaje del hogar y todo tipo de piezas antiguas que hacian las delicias de los anticuarios y los amantes de las antigüedades. Se había ampliado en los ultimos años con la colocación de puestos de piezas hechas a mano por todo tipo de artesanos o aficionados. Des de muñequitos de ganchillo a piezas de cobre bruñido.

Pasearon tranquilamente, casi como una pareja. Habia mucha gente, se oían regateos aquí y alli y parecía que todo tenia que venderse en un solo dia. El mercado duraba dos dias asi que decidieron alojarse en un pequeño hotelito a las afueras del pueblo para disfrutar con calma. Ninú se sentia de nuevo joven. Recordaba una ocasión paseando por Tayranarth, la eterea ciudad que era su amor eterno. Lloró tanto al saber de su caida! Y más cuando supo de la muerte en ella de Ubarnias, el dulce hermano de Landas con aquel talento tan increible para la musica!

 

Cenaron en un restaurante cèntrico, que parecía ser local de moda pues les costó encontrar mesa. La comida era excelente, pato bien cocinado, con una salsa dulce deliciosa, verduras salteadas, cordero al horno con patatas que pidió Asharash. Todo delicioso, un servicio excelente … agua con gas para Asharash y vino para ella. Se le hacia raro que el no bebiera.

– Me gustaria disfrutar de una pinta en el pub.

– Tan mal te sienta?

– Si. – Ninú puso cara de fastidio

– Pero … antes podias beber

– Sigo pudiendo beber Ninú. Digamos que yo si, mi higado no lo tiene tan claro. Paso de pasar mala noche. Se puede vivir sin beber alcohol

– Lo se.

Por Carretera, Aldea, Noche, Calma

Ninú se quedo dormida en la cama mientras Asharash andaba por el pueblo de noche. Era un lugar tranquilo. Luego volvió y se fue al salon del hotel. Habia dos hombres alli charlando con sus pipas medio apagadas y unas copas de licor. Asharash se sentó en un sofa apartado donde sacó su pipa de un bolsillo del abrigo que habia colgado en el respaldo del asiento. Se preparó bien la pipa y sacando un libro del mismo bolsillo se acomodó a leer.

– Perdone joven – le dijo uno de los hombres – Le imaginaba en la cama con su mujer

– No es mi mujer, es la hija de mi tia. – el hombre se sentó en el otro sofa, el otro hombre se acercó más prudentemente y también se sentó

– Disculpe pues – el otro hombre estiró el brazo con la mano abierta. Asharash se habria reido si no fuera porque este tipo de apuestas se basaban en ideas preconcebidas y le molestaba. – Esta bien, Jonas, ya se que he perdido.

– Espero que no hayan apostado mucho dinero nos parecemos bastante.

– Aja – dijo el tal Jonas – Eso he dicho yo, eh Stephen … – el aludido gruñó – No sabe perder.

– No deberia apostar pues.

– No es asunto suyo

– Ni suyo mi parentesco con la persona que me acompaña – respondió el sin perder la sonrisa. Cualquiera lo habria calificado de amigable, atento. El hombre iba a decir algo pero se levantó y tras darle un par de billetes al otro hombre se disculpó para ir a dormir. Algo en la sonrisa de ese hombre le ponia los pelos de punta

– Debe disculparlo, un hombre solo, acostumbrado a la vida social que se ve recluido en este hotel de este pueblo tan pequeño.

– No me parece un mal pueblo – dijo sin inmutarse

– Quintaip es un buen lugar – dijo Jonas sentandose – Me presento, soy Jonas Mufler, vivo ya retirado, me quede viudo hace unos meses.

– Asharash, estoy de paso

– Tomaria una copa conmigo?

– No – tan tajante que el tal Jonas se quedó helado. – Viven en el hotel?

– Ah si, si … ya hace años que Stephen vive aquí, yo venia a verlo y al quedarme viudo decidí que para que quedarme solo en casa … con los recuerdos y eso. Mi sobrina me ayudó a venderlo todo, me quedé con lo justo e imprescindible y vivo aquí. Es un buen lugar. El dia que necesite una enfermera las 24 horas ya tengo vista una residencia aquí cerca a buen precio.  – fue bajandola voz, su oyente parecia no escucharlo.

– Un buen arreglo – vaya, pues si que lo escuchaba. Tenia la extraña sensación que no necesitaba escucharlo para saber lo que le estaba diciendo. Se sentia escrutado. El hombre sonrió

– Ustedes no son de aquí, cierto?

– Es importante?

– Un buen caballero lo es de donde sea, hay cosas que no saben de nacionalidades u origenes. Mi difunto abuelo, un hombre de los de antes, un renacentista a su manera, siempre decia que la caballerosidad no conoce de razas.

– Un hombre como hay pocos …

– Si – respondio pensativo. De repente le pesaba la ausencia de su abuelo que siempre vio a su mujer con buenos ojos, que siempre le dijo que era bella. Miró a su interlocutor. No estaba. En su lugar habia un gato sentado lamiendose una pata y lavandose la cara. Sintió un escalofrio y decidio que era el momento de irse a dormir.

Antique, Old, Room, Furniture, Mood

Cuando Ninú despertó, antes de la salida del sol, vio a Asharash sentado en la ventana.  Tenia un gato sobre el regazo y dormia. Se acomodó en la cama y lo observó. Le gustaba verlo dormir. Si estaba el lugar oscuro podia ver la fina linea dorada en que se convertian sus ojos. Si se concentraba podia oir su corazon palpitar y … más allá la Musica. Se quedo escuchando tranquila, la relajaba la seguridad de que pasara lo que pasara el era la roca a la que anclarse. Sin poderlo evitar suspiró. El encantamiento se rompió y Asharash la miró des de la ventana con una sonrisa.

– Vamos a andar un rato? – dijo estirandose

– En fin, que remedio, te has despertado y el desayuno no estará hasta de aquí un par de horas.

– Vistete, te espero en la calle. – saltó al suelo, se calzó las alpargatas y salió de la habitación.

 

Les imatges son de :  https://pixabay.com/es/

Ninú y Asharash (1a parte)

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La casa estaba muy bien situada, el camino de la playa llevaba hasta ella de forma sinuosa entre las pequeñas colinas que daban su aspecto singular a la costa. Para llegar a ella tenias que dejar el coche en la entrada del camino. Habia habilitado una zona de parking con un techo de pizarra y paredes de un tono azul palido. Incluso habia unos bancos por si tenias que esperar que alguien te recogiera. Eran unas antiguas caballerizas que habia hecho reformar al comprar la propiedad. Un viejo faro con vivienda en desuso que tenia un camino para bajar a la playa.

Faro de Portland - Foto de stock de Maine libre de derechos

Como le gustaba nadar en el mar se habia enamorado de aquella casa al llegar a la isla. Estaba apartada del pueblo, no se podia llegar en coche y ademas los habitantes de la zona le agradecieron que le diera vida al viejo faro. Al instalarse, una vez acabadas las obras de remodelacion y ajardinamiento puso en marcha el faro. Decian en el hotelito donde se instalo mientras duraban las obras, que des de que nadie cuidaba de el muchos pescadores habian atrancado en la pequeña playa que habia debajo. Alguno habia perdido la vida en las rocas que apenas despuntaban. Se suponía que nadie se acercaba tanto a la costa en aquella zona pero la situacion despues de la Guerra Grande 2 y, sobre todo, despues de la crisis de los combustibles habia lanzado a muchos jovenes a sacarse el sustento en el mar. Con la pesca de costa podian dar de comer pescado a sus hijos.  Pero el desuso del faro lo habia complicado.

Ella habia vivido unos 50 años en la costa sur, en una casa blanca de postigos azulados al pie de la playa pero el turismo se habia incrementado y decidio marcharse. Le vendio la casita a un pintor enamorado del mar y se compro una en el norte, cerca de los territorios de los clanes. No le costaba hacer las maletas y mudarse de un lugar a otro. Lo único que extrañaba era su casa. Pretendia volver a ella en pocos años pero al final ya llevaba 20 años alli, en el faro.

 

Compro el equipamiento a los Contrabandistas y puso en marcha el faro con un sistema automatizado que solo le pedia una revision una vez al mes. Cuando se marchara seguro que encontraria a alguien capaz de aprender el sistema y ocupar su lugar. Era un buen lugar, escondido de miradas indiscretas y facil de defender. Pero levanto un muro dentro del bosque que tenias que atravesar y pidio ayuda al mago para que lo cubriera de magia. Para llegar a la casa debias saber que ibas alli, si no, no llegarias nunca, saliendo de nuevo al camino. De mas de un pesado se habia librado con aquella ayuda del gran mago.

Justo al llegar y girar para dejar su coche vio el Rolls aparcado en las viejas caballerizas con las ventanas bajadas. Solo conocía una persona capaz de dejar un Rolls como aquel, aparcado lejos de la vista sin cerrar las ventanillas. Cabia la posibilidad que incluso tuviera la llave puesta. Aparco su coche al lado y al bajarse miro dentro del Rolls. No estaban las llaves. Ventanas abiertas pero coche cerrado. Suspiro, era incorregible!

Cogio su bolsa y enfiló el camino internandose en el bosquecillo. Cuando llegó la casa estaba abierta, los postigos sueltos, las cortinas se mecían al aire. La puerta invitaba a entrar. Una vez en el interior miro a su alrededor. Habia un cesto con fruta en la mesa del comedor. Se dirigio a la cocina, el aroma de te especiado le inundo la nariz. Busco la jarra de cristal pero no estaba, ni el cesto del pic nic. Muy bien, ya podia imaginar donde estaba.

Fue a su habitacion a hacer un cambio de ropa, se puso un traje de baño y un batin de seda traido de oriente. Luego se calzo las sandalias y salio al jardin. Se arreglo el sombrero mientras bajaba el camino empedrado hasta la playita. Alli estaba, sentado en la arena sobre una toalla enorme en la que vio la jarra de cristal con el te con hielo y dos vasos altos. Su cuerpo brillaba aun con la piel mojada y el cabello parecía perlado por el efectos de las gotas de agua detenidas en el. Un efecto mágico sin duda, que le daba un atractivo que podia tener efectos desastrosos en cualquiera.

 

– Habras bajado una toalla para mi?

– Por supuesto – dijo palmeando la gran toalla en la que estaba sentado.

– Hasta has tenido la decencia de ponerte una especie de pantalon – el se giró hacia ella y le sonrió, aquella sonrisa por la que podían caer imperios.

– La decencia es un concepto muy extraño al que te estas aficionando mucho. – ella se quitaba el batin y se sentaba a su lado mientras lo escuchaba. – Sera por culpa de las compañías…

– Aun no has querido conocerlo.

– Si sigues con el despues de estos años será que es bueno para ti. Tampoco tu conoces a Maisa. .- tenia razón. Siempre daba en el clavo – No es un pantalon, es un bañador.

 

Ninú se quedo en silencio y el le pasó un vaso alto lleno te con hielo. Lo agradeció con una sonrisa y bebió un sorbo. Delicioso. La verdad es que lo que más extrañaba de Andgiand era el te tan especiado que preparaba tanto en invierno, caliente que reconfortaba el animo, como en verano, cuando le añadía menta fresca o raspaduras de limón.

El sonido de las olas rompiendo contra las rocas los acunaba mientras el sol empezaba a estar bajo y le daba de costado. El seguía mirando el mar en silencio y cuando lo veía así ella no se atrevía a molestarlo con sus pensamientos. Siempre habia creido que su mente se movía a otra velocidad, que  habitaba en lugares extraños, lejanos.

Al fin se levantó y se metió en el agua. Lo vió nadar.  Ella se bebio el te mientras lo observaba. Cuando salió se sentó a su lado chorreando agua. A su lado siempre se sentía tan segura que incluso si el universo entero se hundía ella sabia que allí estaría el para reconstruir su trozo.

 

– He pensado en vender la granja.

– Bueno – lo miró asombrada

– No pones ninguna pega?

– Yo? Es tuya Ninú, si encuentras a alguien que la vuelva a poner en marcha y que sea capaz de comprender sus implicaciones adelante.

– He puesto un anuncio en un pequeño periodico de Niuvar. De la zona norte de Niuvar, donde viven la colonia contrabandista y los iluminados.

– Muy bien.

– No te importa, de verdad?

– Debería? Es tu granja Ninú. No decías que querías volver a vivir ahi? Pues será bueno que haya alguien ya cuidando de la granja. Cuando te vas a ir?

– Este año. En otoño.

– Venderas esto?

– He localizado una joven pareja que quieren vivir aislados. Tienen dos bebes iguales. Gemelos. Con una curiosa fobia a los ruidos. Esto es tranquilo y el mayor ruido es el de las olas. Estoy enseñando al chico a manejar el faro. La muchacha forma parte de la comunidad de brujas de por aquí. Ya me va bien. Esta entendiendo que en esta casa hay cosas “diferentes”.

– Mmm como un muro algo curioso. Entiendo.

– Que me ha dicho el Mago que vais a ir a hacer conciertos por ahi?

– Si

– Para?

– Es una manera que Martin conozca Puerto Solen, yo no me aburra y pueda visitar algunas zonas que tengo algo abandonadas, como el  consulado de Puerto Sidi.

 

Se volvieron a quedar en silencio. No hacia falta hablar mucho, ninguno de los dos era hablador.

Al cabo de un rato, sin decirse nada, ambos se levantaron y el recogio la toalla mientras ella metía  jarra y vasos en el cesto. El le ofreció su brazo y ella se colgo de el. Siempre que iban asi se sentía la mujer mas afortunada del mundo. El siempre le daba seguridad, algo a lo que anclarse, una especie de timon guia que convertia la vida en algo mas asequible.

Entraron en la casa y fueron a la cocina.

 

– Me doy una ducha y te preparo la cena – dijo el con una sonrisa.

– Fruta? – respondio ella señalando el cesto. El sonrio ampliamente

– Llevo varias horas aquí, me ha dado tiempo a muchas cosas. No te preocupes, no cenaras fruta.

 

Cuando bajó ella de la ducha, vestida con uno de sus vestidos de seda bordados, el ya estaba en la cocina picando verduras. O eso creía. Al acercarse vio que lo que hacia era cortar unas patatas en rodajas. Ya tenía un poco de puerro cortado en diagonal, muy fino. Tambien unas lonchas de panceta.

 

– Esta receta le gusta mucho a Yiarza. La hice yo en casa hace un tiempo aprendiendola de ella. Y a Maisa tambien le gustó. No es muy amante del pescado, es algo que no se come en las praderas, pero esta dispuesta siempre a probarlo todo.

– Bueno, veamos como se hace.

– Hay una botella de vino blanco en la nevera. – dijo con un gesto vago. – Sirve mientras preparo y te enseño como hacerla. Para agasajar un dia a … Duncan? – y sonrió. Claro que recordaba el nombre, no solía olvidar nada. Para eso tenia su gran memoria y a un mago que era un portento y muy chivato.

– Vino? Creía que no bebías.

– Una copa de tanto en tanto no me hace daño.

 

Lo escuchaba mientras abria la nevera y descubria el vino casi frapeado. Lo debia haber puesto en el congelador al ir a pescar. Descorchó y sirvio en dos copas de cristal fino que fueron a tomarse al lado del ventanal. Asharash hacia bastante tiempo que no se llevaba bien con el alcohol. Siguieron charlando, sobre todo ella, y recordando viejos tiempos y a viejos amigos. Demasiados que ya no estaban con ellos. Echaba en falta su compañia, su escuchar silencioso. De repente se levanto y fue hacia la cocina.

Abrio el horno y saco la bandeja. Sirvio el pescado en dos platos alargados. Estaba delicioso. Luego se tomaron las copas de vino, la segunda de ella, en el jardín. Acunados por el trinar de los pajaros nocturnos. Un gato se sento en el regazo de Asharash ronroneando.

Al cabo de un rato el se levantó, entro, salio con las llaves del coche y sonrio.

 

– Voy a cerrar las ventanillas de coche, no vayan a entrar ardillas o ratones. No me esperes despierta.

– No pensaba hacerlo.

 

Se levanto de madrugada, como era su costumbre, para romper el sueño. En el jardin seguia estando la copa de vino de Asharash medio llena, la botella de vino, su copa y las llaves del coche. El gato dormia hecho un ovillo en la silla. A veces se preguntaba como ocupaba sus horas de noche, rodeado de personas que dormian mucho mas que el. Tantos años al lado de un marash que necesitaba casi 10 horas de sueño, con una mujer que dormia lo normal, con gatos que era como tener marmotas … Habia cosas que quizas no le valia la pena saber. Se volvio a la cama tras beberse un gran vaso de agua.

 

Fotografia de:   https://www.istockphoto.com/es

Planificando

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Decía una vieja canción: Bienvenidos!! La cantaba Miguel Rios en sus conciertos y era coreada a voz en grito por todos los asistentes como si les fuera la vida en ello. A mi me chiflaba, la canción no Miguel Rios. Me sigue gustando. Como algunas otras canciones de el.

El caso es que el grito viene al caso porque si te has caido por aquí precisamente hoy, o ,siendo más correctos, en esta entrada, estás de suerte. Y lo digo asi, con premeditación. Porque hoy es un buen dia para entrar en este blog. Es el dia de su retorno.

Typewriter, Vintage, Write, Letters

Hace unos meses abri un nuevo blog en catalán, mi idioma cotidiano, porque a veces se me ocurren historietas mientras voy por ahi caminando y haciendo fotos. Pero siempre son en catalan, claro, porque es el idioma de cada dia. Hubo un tiempo en que decia, bah, la traduzco y la publico. Pero mira, no lo hacia y asi, lentamente, mis patitas fueron quedandose quietas, paradas, como si les faltara energia. De hecho se quedaron sin energia. Sin combustible mas bien: sin historias que contar.

Pero de historias yo tengo un montón en la recamara. Para precisar, en el disco duro del ordenador. Escritas en castellano porque mira tu por donde para escribir historias hace ya un porron de años que me pasé al castellano. Porque? Bueno diriase que la agilidad y la cantidad de vocabulario era mejor.

El caso es que como decia historias tengo un montón. Todo un universo construido, creado y habitado por multitud de personajes. Y hasta tengo algunos fragmentos capaces de emocionarme hasta a mi que me los conozco al dedillo. Bueno, al dedillo va a ser que no porque he tenido un tiempo de sequia creativa y se habian quedado ahi, como olvidadas.

Notebook, Paper, Page, Empty, Blank

En fin que la cosa es que he vuelto con ganas para demostrar a alguien, quizas únicamente a mi y a algun lector despistado como tu, que soy capaz de crear emoción. Que mi pasión por la escritura no se limita al diario personal, las descripciones de fotos o algunas historietas cotidianas que pueda explicar.

Por si teneis interes y leeis el catalan o usais google translate:

https://dedracsiracons.wordpress.com/

La siguiente entrada ya tendrá contenido. La idea es ir publicando fragmentos escogidos. Tengo mucho texto y como diria Stephen King, no le he pasado suficientes veces la tijera. Asi que, bueno, paciencia.

Diria que publicaré cada semana, pero bueno, seamos realistas, me habeis visto cumplir alguna vez un plazo en este blog los que ya me conoceis? Pues eso. Decidselo a los que acaban de llegar. Al afortunado que se ha caido por aqui precisamente hoy.

Cuando lleve unos meses publicando con una frecuencia aceptable me creereis. Los lunes es un buen dia, inicio de semana. Aja.

Ocean, Great Ocean Road, Australia

«La casa estaba muy bien situada, el camino de la playa llevaba hasta ella de forma sinuosa entre las pequeñas colinas que daban su aspecto singular a la costa …»

Imatges sense marca d´aigua propia:   https://pixabay.com/

 

De lunes 11 de junio

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Vaya, ha pasado un mes des de mi ultima entrada. Suerte que no hice ninguna declaración de mis planes de actualización del blog! Habría hecho el ridículo como siempre.

Atardecer des de casa

En estas semanas han pasado un montón de cosas que, para no aburrir, no voy a contaros todas aqui.

Mesa de domingo en el 100Setze

Pero en estos días de cambios estoy pensando en como cambian nuestras vidas y rutinas casi sin que nos demos ni cuenta. A veces si que nos damos cuenta pero estamos tan inmersos en ellos que no podemos ni pararnos a mirar. Ya miraremos más adelante, cuando esto pase decimos. Y seguimos adelante, casi sin respirar, esperando que todo se tranquilice.

Lamento decir que las cosas no se tranquilizan, somos nosotros que debemos tomarnoslas con calma. Aunque a veces se nos hace imposible. Casi siempre. El ritmo febril de la vida cotidiana y el empuje estresante de la sociedad que nos rodea nos lo pone dificil.

Agradezco pues que el trabajo por cuenta ajena en el que estoy ahora me da tiempo para respirar. No hay plazos que cumplir y me permite parar. Sobre todo porque «parada» es la forma en la que trabajo.

También me ofrece la oportunidad de sacar fotos. Bueno eso me lo ofrece la vida en general quiero decir más fotos. Fijaos en estas dos:

Vecindario

Un rostro en la esquina

Y como voy hasta la ciudad en coche he decidido plasmar en foto el atardecer. O bueno, para expresarlo mejor, los colores del cielo cuando recojo el coche en el aparcamiento de La Pau. Más o menos cada día y des de la salida del metro. Bueno, des de la entrada para peatones del aparcamiento.

Tengo unas fotos la mar de majas y curiosotas de los felinos que viven con nosotros.

Y estas otras:

Siguiendo con la búsqueda de calma en esta atareada existencia nuestra sigo con mis proyectos de ganchillo. Algunos hasta los acabo.

Aqui este:

Es una pelota Montessori que me ha tenido entretenidilla muchas tardes. Proyecto que hay que coger con calma, paciencia y tiempo. Crei que sería más fácil y que no me llevaría tanto acabarlo. El peque para quien está hecha nació hace un par de meses.

Al hilo, nunca mejor dicho, del tema ganchillero esta semana traigo una novedad. Con las compañeras de tai chi decidimos celebrar que este sabado era el día mundial de tejer en público.

Cartel en la tienda «all you knit is love»

Una de nosotras, más emprendedora en estos temas, se curró un cartelito y lo colgó estratégicamente por algunos rincones del pueblo.

A ver que pasa… dijimos.

Quizás no viene nadie …

Pues si que vino alguien. Muchos alguienes. Y se generó una energía tan maja que estamos dispuestas a repetir. Ya hemos montado un grupo de wattsapp y quedado para el 7 de julio. Misma hora mismo lugar.

Fue allí donde le di el último impulso a la pelota.

Además para mi será bueno porque tendré apoyo para emprender proyectos más grandes (y acabarlos) que los que suelo hacer.

Os dejo con unas últimas fotos. Ultima de la entrada y última con mi viejo coche de protagonista. Nuestro querido Fiat Punto que en tantas aventuras nos ha acompañado ya es historia. 250.000 kms con nosotros. Tantos lugares! Tantos recuerdos!

De viernes 11 de mayo

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Como todos los que me leeis ya sabeis Instagram es mi red social preferida. Me gusta la fotografía y suelo colgar bastantes fotos. Pero últimamente, bueno ultimamente no, ya hace meses de esto, siento que se está haciendo cada vez más impersonal y convirtiendo en un aparador de venta. Seguimos publicando algunos que lo usamos como aparador de vida. De una vida que nos gusta compartir con amigos y conocidos.

Sin embargo siento que me falta espacio para escribir. Hay quien escribe auténticas parrafadas pero creo que no es ese el sentido de Instagram.

Asi que con esa necesidad de escribir vuelvo a esta bitácora y a sus pocos lectores.

Por si me echabais en falta deciros que yo a vosotros también.

Tengo un propósito en mente con este regreso pero no lo cuento porque seguro que no lo cumplo 😅 así que simplemente os digo que gracias por seguir ahí.

Esta semana, que empezó el viernes pasado, la inicié en Barcelona.

Visitar la ciudad se ha convertido en rutinario con todo el trabajo y papeleo que se ha hecho y aún queda por hacer tras la muerte de mi padre.

En cada visita hay algo nuevo por descubrir y, si vuelvo a ella además para trabajar, un sinfin de fotografías para compartir.

He tenido algunos ratos sin embargo para disfrutar del jardín. Cuando la meteo lo permitía claro. Y para poder hacer las fotos que más me gustan, cielos y nubes.

Fui a Palamós hace un par de sábados – parece una eternidad pero fue el dia 28 de abril – y encontré unas revistas viejas de ganchillo. Me he animado a hacer un clásico: una bolsa para el pan. Ahora que volvemos a usar las bolsas de ropa no está de más recordar que no hace tanto se hacían a ganchillo.

Cuando la tenga terminada os mostraré ademàs la revista.

También encontré en Palamós una muestra de ese arte urbano que alegra una aburrida puerta metálica de local.

Tuvimos suerte y nos hizo buen día el sábado y pude disfrutar de un buen paseo por el pueblo. Mientras en otras partes llovía mirad que cielo azul pude admirar yo:

Cocina:

Hoy he cocinado una receta del libro de Ferran Adriá «El menjar de la familia».

He utilizado unos contramuslos de pollo en lugar del cuello de cordero del original y lo he acompañado con brocoli salteado.

La próxima vez pondré menos agua y usaré cordero. Seguro que queda tan bueno como el pollo de hoy.

Como ya no tenemos al probador oficial tendreis que fiaros de mi criterio.

Libros:

Bibliotecas, esos lugares. Ya os hablé en otra ocasión de ese fantástico lugar que es una biblioteca. Llena de libros a cual más interesante que te dejan llevar a casa para leerlos con calma y un te caliente. O una sidra.

Este mes he leido este:

Entero quiero decir. Lo recomiendo para todo aquel que tenga interés en profundizar sobre las teràpias médicas alternativas y los estudios que se realizan sobre ellas. Narrado con bastante objetividad estoy segura que puede abrir la mente a muchos.

Y ahora estoy ojeando este otro:

Y digo ojeando porque este es un libro de consulta continua. No vale leerlo y ya está. Lleno de consejos útiles debería ser uno de esos libros de cabecera. O aprenderse de memoria para usarlo cada día.

Hasta aquí la entrada de hoy. Voy a decir lo de siempre, tengo algunas entradas en el tintero esperando a ser redactadas. Nacen de alguna foto que a veces ni siquiera publico en Instagram. Ya os digo, a veces da cosita publicar según que fotos.

Tened fe, algún día esas fotos y esas historias verán la luz.

Urbanizaciones que no lo son

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Por fin ha llegado el frio. Ya era hora! Pero junto con la buena nueva de la bajada de las temperaturas llega la pereza hivernal. Esa sensación que recorre todo tu cuerpo cuando a las 7 de la mañana sacas el pie de la cama y notas el frío que se ha instalado en la casa a pesar de los esfuerzos de la pequeña estufa.

Esa sensación que te lleva a pensar que en el exterior, en esa aún oscura mañana, el frío es real. Sacas los dos pies, sales de la cama, dejas entrar al perro con algo del aire del exterior y tras una visita al lavabo te metes de nuevo en la cama.

Hace frío, está oscuro, no tengo ninguna obligación inexcusable … es hora de leer un buen rato en el silencio de la mañana y el calorcito de la cama. Pronto el peque de la casa – que ya no es tan peque, dios mio como crecen de rápido los gatos! – se une a mi.

Eso quiere decir, resumiendo, que lo de salir a caminar ha pasado rápidamente de ser un hábito mañanero saludable a una rato anecdótico al mediodía. 

Mal hecho. Lo se. Pero cuando hace frío y tu estado de ánimo no es bueno los hàbitos saludables se esconden en un rincón. Un rincón acusador pero rincón y por tanto poco visible.

Así que hoy he salido un rato a tomar el sol con mi amigo peludo, la ovejaladradora, y nos hemos ido a explorar.

Hay cierta fascinación en mucha gente por los lugares abandonados. La red està llena de blogs y fotografías dedicadas a ellos. Es una fascinación que comparto.

Me gusta pensar en las vidas de las personas que recorrieron aquellos lugares. Quizàs de hace décadas o siglos. Sus costumbres y formas de pensar. Es el alimento de la imaginación de un escritor.

Jaciment arqueologic El Castell

Pero el lugar donde hemos ido hoy no tiene ese encanto de los lugares abandonados. Nunca fue un lugar habitado más que por los proyectos de algún constructor ambicioso.

Hay un par de casas, confieso mi sorpresa al descubrirlas, y un campo de golf adyacente. Pero en general es un lugar desolado.

Personalmente me parece más desolado que casas, castillos o fábricas abandonados. En aquellos las paredes, las piedras que las forman, los espacios, guardan historias, recuerdos acaso.

Castell de Torroella de Montgri

Pero aqui …

Aqui solo hubo sueños truncados … La crisis, la ambición, la falta de permisos o apoyos institucionales. No quiero entrar en la historia de este abandono. Solo mostrar la desolación.

Espacio propicio para los artistas urbanos que muestran sus quejas a su manera.

Y por otro lado la oportunidad de la naturaleza para recuperar su lugar pese a la prepotencia humana. 

Siempre es así. Si nadie le pone freno pongamos que en una década este lugar será de nuevo naturaleza salvaje.

Foto denuncia 

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Como os decía en el post anterior, ahi van unas fotos denuncia la mar de «majas».

A veces nos preguntamos de donde salen algunas guarrerías que vemos por el monte. Como aquel famoso colchón que fotografié hace semanas.

El origen de estos bidones y ruedas está localizado. Los madereros usan este aceite para las maquinas.

Algunos bidones estan llenos. Y las ruedas no parecen estar en muy mal estado.

Soy optimista, me gusta pensar que volveran a por ellos. 

Pierdes un calcetin cuando vas a caminar por el bosque? No lo echas en falta?

Y esto  … que debe ser??

Paseo por La Cazanía

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Este año estamos yendo mucho a nuestro querido pueblito. Cada vez nos sentimos más cómodos allí, más acogidos y, hay que decirlo, más pertenecientes. Bueno, puede que la palabra «pertenecientes» no sea del todo correcta pero resume muy bien mi sentir.

Después de las vacaciones de verano allí hemos vuelto dos veces más. 

Las vacaciones fueron en septiembre que hizo un calor más propio de julio/agosto y por eso podemos llamarlas de verano. Me he vuelto algo olvidadiza y no os escribí todas las entradas que pensé mientras vivíamos nuestras aventuras. Pero no desespereis, en mi voluntad está la de adquirir un hábito de escritura más constante. Mi amiga AT y yo estamos trabajando en ello. 

Luego estuvimos para la Feria Ganadera donde, como cada año, pudimos socializarnos con los ganaderos y admirar la belleza de vacas, terneros, toros, cabras y ovejas. Este año las ovejas se han beneficiado de los pastos más secos que no son del gusto de las vacas. Hemos visto ovejas y carneros bien rollizos. 

Para la fiesta de Todos los Santos tenía Buho Gris dos días guardados y más felices que nadie nos hemos vuelto a ir para allá toda la familia. Los gatillos no lo ven claro, lo de las 3 horas y media de viaje, pero una vez allí disfrutan. 

La mañana del jueves nos subimos con Timilio hasta La Cruz dispuestos a dar un paseito por la pista de La Cazanía. 

A mi me chifla. Es una pista agradable rodeada de bosques donde una vez, ya hace años, vi un urogallo. Se alimentan de los frutos del acebo en invierno y es una especie protegida así que me sentí muy afortunada.

Los tres tenemos intereses comunes y siempre vamos charlando mientras admiramos las vistas y las futuras – o pasadas – excursiones.

Caminamos entre los árboles hablando animadamente. A la ida porque a la vuelta descubrimos que la pista no es llana y hacía subida. Pasamos hasta calor.

Esta vez también hubo el momento foto denuncia. 

Os la pongo en otro post.

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